Me he dado cuenta que cuando enseño nuestras casas de muñecas casi nunca hago hincapié en las cortinas, no sé si porque suelen estar en la fachada que se abre y una vez abierta ya no las vemos, o porque simplemente se me olvida, el caso es que he decidido dedicarles una entrada solo para ellas, ya que son un elemento que le da vida y realismo a las casas.
Por ejemplo, la fachada de esta pequeñísima casa no se vería igual sin estos visillos de encaje que tiene, tanto en las ventanas como en su gran puerta.
A través de las ventanas de la Casa Rosa también podemos apreciar que tipo de cortinas tienen sus habitaciones, en la ventana del pasillo que esta justo encima de la puerta, pusimos un visillo de encaje que me encanta como queda.
Para el salón elegimos una tela de rayas rojas y blancas con pasamanería en tonos burdeos. Para el dormitorio utilizamos una tela con pequeñas flores azules en fondo blanco, todo acorde con la decoración de las habitaciones. Las galerías de todas las habitaciones son de madera con forma de ondas.
En la cocina también elegimos tonos azules y blancos pero esta vez con una tela de cuadritos, y su pasamanería en esos mismos tonos, y para el baño un tul blanco con pasamanería rosa.
A la Casa Azul, al ser de estilo mediterráneo, le pusimos persianas en todas las ventanas por el exterior y visillos de encaje por el interior.
Esto se aprecia muy bien en estas dos fotos de la ventana del baño.
A la puerta de entrada le colocamos unos visillos de tul, que dejan pasar la luz y mantiene la intimidad de dentro, lejos de miradas indiscretas.
También elegimos tul para la puerta del dormitorio, pero en esta ocasión lo dejamos suelto, para que el aire fresco de la mañana lo mueva a su antojo.
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