Hacer una casa para el belén es un proceso un poco más largo de explicar, por lo que hemos dividido el tutorial en dos partes.
En la primera parte vamos a hacer los diferentes módulos que componen la casa, y en la segunda haremos los tejados, el montaje de todos los módulos y la decoración final. No os vamos a dar medidas porque van a depender del tamaño de vuestros belenes y de las cajas que uséis para hacer las casas, y los materiales los iremos viendo a medida que hagamos la casa.
Para hacer nuestra casa utilizamos cajas de cartón de diferentes tamaños, como las que veis en la primera foto.
Primero decidimos que cajas vamos a utilizar y como las vamos a distribuir, una vez decidido esto, dibujamos los huecos de puertas y ventanas, ubicamos las escaleras y todos los elementos que vamos a poner, por cierto, el palomar tan grande que veis en la segunda foto lo sustituimos al final por otro más pequeño.
Recortamos todos los huecos con un cúter, teniendo en cuenta que huecos vamos a quitar por completo, y a los que le vamos a dejar una solapa (puertas), también cortamos la parte alta de las cajas en diagonal desde la tapa, sin quitar esta, para hacer la pendiente de los tejados (como veis en la foto). Volvemos a ubicar nuestros módulos para ver cómo queda.
Para proteger las cajas de cartón le damos gesso transparente primero y gesso blanco después, para tapar los letreros de las mismas.
Las puertas las pintamos con pintura acrílica oxido amarillo y marrón, dejando que se vean las pinceladas para imitar las vetas de la madera. Cerramos la parte alta de las cajas que forman el tejado y las pegamos con cinta de carrocero.
Con aguaplast, gesso blanco, pintura acrílica beige, cola, arena y agua hacemos una pasta de textura para darle a la fachada, solo en las zonas que no se unen los diferentes módulos de la casa, estos espacios los dejamos libres para poder pegar los módulos después con facilidad.
Cuando estén secas las fachadas y ayudándonos de una plantilla de estarcido, hacemos unos resaltos con forma de piedras en algunas zonas de las fachadas. Estas zonas, una vez secas, las pintamos con una aguada de pintura acrílica marrón, para resaltar las huellas de la piedra.
Este proceso de pintura aguada lo repetimos con los colores oxido amarillo, marrón chocolate, y beige, para ir dando aspecto de envejecido, también le damos unos toques de verde para simular el verdín de la humedad.
Para los marcos de puertas y ventanas cortamos cuadrados y tiras de cartón finito, que también pintamos con los mismos tonos que le dimos a las puertas.
Vamos presentando las tiras en las ventanas para tomar las medidas.
Y las vamos pegando por dentro de la caja, para ello abrimos la zona de la base, que aún no la hemos pegado, le damos cola a los extremos de las tiras de cartón y con mucho cuidado las vamos pegando desde dentro.
Ahora cortamos un trozo de tela para hacer las cortinas y también lo pegamos desde dentro, le damos cola alrededor de la tela y lo introducimos en la caja a la altura de la ventana.
Por ultimo pegamos los marcos de las ventanas, hacemos lo mismo con el resto de puertas y ventanas.
A algunas puertas le añadimos unos travesaños, que también hacemos con cartón finito pintado de marrón y los pegamos a la puerta con un poco de cola.
Para la puerta principal hemos utilizado una rejilla de papel kraft que teníamos por casa, la hemos pintado de negro y envejecido con unos toques de oxido amarillo, para que parezca una reja antigua, y después la hemos pegamos con un poco de cola en su sitio. A la puerta principal también le hemos puesto una cortina.
Y aquí nos quedamos por hoy, os enseñamos unas fotos del resultado final para que os animéis a ver la segunda parte la próxima semana.
Gracias, y si te gusta lo que ves, no olvides compartirlo.
Bonito resultado y además reciclando marerial.
Un saludo
Un trabajo concienzudo de reciclado, me encanta los volúmenes que creais.
Un beso