Hemos decidido meter los últimos momentos del verano en un bote para que nos acompañen a lo largo del próximo invierno y así no echarlo tanto de menos. En este pequeño rincón de paz y tranquilidad podemos dejar pasar las horas mirando al mar mientras algún pez pica el anzuelo y si el calor aprieta, tomar un refresco o dormitar un ratito a la sombra. Esperamos que os guste y no dudéis en visitarlo cuando queráis trasladaros a ese momento de ensueño en la playa.
Si te gusta lo que ves, no olvides compartirlo.
¡Me encantaaaa! Es una idea original y muy chula. Si hasta le habéis puesto el sol.
Un abrazo
VictoriaCM
Que bonito.
Una obra de arte playero